Y pese a todo seguimos soñando…

Martin Azpilkueta (17 Feb)

A falta de unas horas para que tenga lugar el Washington County’s Caucus que se suspendió debido a la famosa Tempestad de Nieve de 2012 se han hecho públicos unos datos que pretenden hacernos caer de golpe en la realidad.

A la vez que se celebraban los caucus suspendidos en el condado de Waldo y en Waterville sumando Ron Paul en ambos 90 votos recortando sustancialmente la ventaja que le sacaba Mitt Romney, el GOP de Maine decidió hacer públicos los resultados caucus por caucus una vez rectificados los errores en el recuento, dando como resultado que la diferencia de votos se ampliaba hasta 239

Hemos de ser conscientes, haciendo un símil futbolístico, de que el GOP pone el campo de juego, el balón, el árbitro (es el propio partido el que recuenta los votos a puerta cerrada), el Reglamento (abrogándose la capacidad de modificar las normas en mitad del partido) y no va a dejar que no gane otro que no sea su candidato Mitt Romney.

Y es que la victoria aplazada de Santorum en Iowa ya no volverá a ocurrir, debido a que la situación actual es completamente diferente a la de inicios de Enero, ya que si en Iowa había una amplia variedad de candidatos aceptables para el establishment republicano como podían ser Perry, Huntsman, Cain o incluso un Gingrich que pese a su actitud demagógica, populista y de outsider del sistema ha sido y es un elemento clave dentro del GOP, estos eran preferibles a un candidato del que parte de la base electoral recela por su centrismo y otra parte recela por su confesión mormona.

Es por ello que el GOP y los medios afines potenciaron a un Santorum con escasísimas posibilidades ya no de ser nominado sino de poder concurrir en más de 4 estados por su falta de medios económicos y humanos, solo con el fin de debilitar a Romney en este caucus y esperar tiempos mejores para sus candidatos. Pero el devenir de los acontecimientos a veces juega malas pasadas y Perry, Huntsman y Cain se apearon enseguida y la campaña de Gingrich hace aguas a velocidad de crucero. Por lo que el GOP no ha tenido más remedio que apoyar a un Ronmey que se enfrenta a dos outsiders que no se apean de sus principios (ultraconservadores en un caso y libertarios en el otro) como son Rick Santorum y Ron Paul, y no dejarán que ninguno de los dos dé la mínima sorpresa de aquí a la Convención de Tampa

Pero seguimos soñando pese a los recuentos sospechosos en Nevada y en Maine, seguimos soñando pese a los continuos apagones informativos que los medios de comunicación le hacen a la campaña de Ron Paul, seguimos soñando pese a que uno tras uno se van cayendo de la parrilla televisiva los programas presentados por gente que ocasional o permanentemente apoyan a Ron Paul o su discurso, seguimos soñando pese a presiones menos veladas como la detención de Rand Paul por la TSA y seguimos soñando porque el GOP merece una revolución, la r3volucion, que le haga volver a sus principios fundacionales acordes con los pensamientos de los Padres Fundadores y abandonen esa posición, con bien dijo el otro día Andrew Napolitano (en un memorable speech de 5 minutos que le costó su programa), que hacen que el Partido Demócrata y el Republicano parezcan dos alas del mismo partido, El Partido de la Guerra, del complejo militar-industrial, de las grandes corporaciones que han corrompido el capitalismo.

Necesitamos seguir soñando que Ron Paul podrá vencer al Partido de la Guerra que aupó a Barack Obama a la presidencia para ejecutar el programa que ya vienen aplicando Clinton y los 2 Bush. Un programa que nos ha traído Guantánamo , la Patriot Act y que en 2012 se ha acelerado con la aprobación de la NDAA (que permite la detención indefinida sin previo juicio), el intento de aprobación de la censura en internet a través de la SOPA-PIPA, la aprobación del vuelo de 30.000 drones para espiar a la población estadounidense y la amenaza por parte del FBI de que serán vigilados todos aquellos que aboguen por el patrón oro y digan que la economía de EEUU es un globo a punto de estallar (siendo estos puntos claves del discurso de Ron Paul es obvio que es un aviso a sus seguidores en EEUU).

Es por ello y pese a que la realidad es dura y obstinada por la que seguimos soñando que la R3volucion continua y llevara a Ron Paul a la Casa Blanca